Sony ha presentado una nueva patente para su control de PlayStation 5 (PS5) DualSense que está fabricado con un material elástico capaz de responder a gestos como pulsaciones o apretones y de cambiar de temperatura durante su uso.
El último mando presentado por la compañía tecnológica japonesa para su consola de última generación es DualSense Edge, que admite la personalización de los controles para adaptarlos a las necesidades del jugador.
Otras de sus funcionalidades destacadas son la opción de recalibrar las llamadas zonas muertas de los 'joysticks' y de los gatillos, así como la interfaz de usuario en el mando para crear perfiles y cambiar entre ellos de forma intuitiva.
Según esta patente, este control utiliza un material elástico y deformable -como un material de gel macromolecular y otros elastómeros- "para enriquecer las experiencias hápticas del usuario".
Gracias a este nuevo formato, el mando es capaz de reconocer gestos de los usuarios, de modo que se podría pulsar, girar, pellizcar o frotar, entre otras acciones, concetradas en esa parte elástica del dispositivo.
En la patente también se menciona que el controlador también puede "comunicar al usuario la sensación de calor y frío", lo que indica que su temperatura podría cambiar en base a lo que esté sucedienco en durante el juego.