Para ello, la aplicación recopila datos sobre la geometría facial para determinar los parecidos y las diferencias entre las personas fotografiadas, algo que habría infringido la legislación de este estado norteamericano, según ha anunciado Gizmodo.
Esto se debe a que la Ley de privacidad de información biométrica de Illinois establece que cualquier empresa privada que recopile datos biométricos como huellas dactilares, voz o escaneo de manos, retina o rostro, debe ofrecer una política de uso de esa información.
Esta ha de ser pública y debe establecer cuánto tiempo se conservarán los datos recogidos por la aplicación, así como la fecha en la que se vayan a destruir o eliminar.
Google habría infringido esta ley por no informar a los usuarios de que estaba recopilando sus datos biométricos, por lo que se ha enfrentado a una demanda colectiva que ha resultado en un acuerdo de 100 millones de dólares.
Los usuarios de Google Fotos afectados de dicho estado norteamericano podrán reclamar su correspondiente indemnización siempre que hayan utilizado este servicio de Google entre el 1 de mayo de 2015 y el 25 de abril de 2022.
Desde Gizmodo han apuntado que, aunque depende de la cantidad de denuncias presentadas, los pagos a los afectados oscilarán entre los 200 y los 400 dólares por persona.
Aquellos afectados que prefieran excluirse del acuerdo no recibirán ninguna indemnización, pero conservarán sus correspondientes derechos para presentar su propia demanda contra Google o cualquiera de las partes exoneradas.