Entre los nutrientes que sirven para este objetivo destacan los que tienen vitaminas del complejo B, ya que están implicadas en las reacciones que liberan energía y en procesos metabólicos para desintegrar los carbohidratos y transformarlo en energía para las células. También destacan minerales como el magnesio que permite realizar 300 reacciones biológicas en músculos, cerebro, huesos y células.
Está el zinc, que está implicado en 300 procesos metabólicos desde el cerebro hasta el sistema inmune; hierro, que ayuda a que el oxígeno circule por el organismo y las células funcionen y se desarrollen correctamente; o la coenzima Q10, que ayuda a cumplir diversas funciones de los órganos y a llevar a cabo varias reacciones químicas del cuerpo. A continuación te decimos de qué alimentos puedes obtener esa energía.
Alimentos para recuperar la energía
Legumbres:
Los frijoles y otras legumbres son fuente de carbohidratos de lenta absorción que ayudan al organismo a sentirse con energía constante en el cuerpo. También aportan vitaminas del complejo B, hierro, ácido fólico, potasio, fósforo y zinc. Además de los frijoles, incluye en la dieta lentejas, chícharos, garbanzos, soya, etcétera.
Avena:
Es otra fuente de carbohidratos de lenta absorción, esto significa que no se asimilan tan rápido por el organismo y el cuerpo tarda más tiempo en obtener su energía, por eso evita los picos de glucosa y no hace subir de peso. Es también fuente de fósforo, calcio, hierro y lecticina. 3 cucharadas de hojuelas de avena al día son excelentes para obtener energía.
Pescado azul:
Los pescados azules como el salmón, las sardinas, el atún, la caballa, el pez espada o el cazón contienen en pequeñas cantidades la coenzima Q10, una sustancia que ayuda a que se lleven a cabo las funciones correctas en las células y las reacciones químicas, además de ser antioxidante.
Frutos secos:
Son fuente de magnesio, vitaminas del complejo B, proteínas vegetales, selenio y ácidos grasos esenciales que ayudan al organismo a obtener energía. Además aportan triptófano, una sustancia que ayuda a producir serotonina y levantar el ánimo. Un puñadito de nueces, almendras, pepitas, piñones, cacahuates naturales, te hará sentir como nuevo.
Verduras de hoja verde:
Son excelente fuente de energía, porque aportan hierro, antioxidantes, carotenos, betacarotenos, vitaminas K y del complejo B, además de ácido fólico que ayuda a aumentar los niveles de serotonina. Puedes consumir espinacas, kale, acelga, berros, lechuga, col rizada, rúcula, etcétera.
Huevo:
Este alimento aporta proteínas y grasas saludables que ayudan a obtener energía. También son fuente de hierro, fósforo, zinc, selenio y vitaminas A, D, E y K, así como triptófano que también evita tener altos niveles de estrés.
Frutos rojos:
Los frutos rojos son fuente de vitaminas C, del complejo B, potasio, calcio, hierro y fósforo, además de antioxidantes que ayudan a fortalecer las defensas y obtener energía, además de mejorar el estado de ánimo y regular el sistema nervioso. Incluye en la dieta fresas, frambuesas, zarzamoras, blue berries, ciruelas, cerezas, etcétera.
Te puede interesar: Simone Biles: ‘Todavía me da miedo la gimnasia’