El mundo está pasando por momentos complicados. Estamos frente a una de las peores crisis de salud que ha desatado un grave problema a nivel económico y social. La pandemia por COVID-19 nos ha obligado a permanecer encerrados en casa, sin escuelas, ni trabajos ni actividades en el exterior.
Para muchas personas esto ha representado un gran desafío, especialmente para las madres de familia que deben hacerse cargo de sus hijos, al tiempo que deben trabajar y mantener la casa en orden.
Por eso, hoy más que nunca, es importante enseñarle a los niños buenos valores, así como la importancia de ayudar con los deberes de la casa.
Aunque muchos dudan sobre cómo involucrar a los niños en la casa, es importante educarlos para que asuman ciertas tareas domésticas o trabajos de los que sean responsables todos los días o cada cierto tiempo en la semana.
Si bien es cierto que la mayoría de los niños tienen horarios muy ocupados entre las tareas de la escuela y las actividades extracurriculares, la cuarentena por coronavirus parece haberse convertido en un buen momento para poner en práctica lo anterior.
Estudios de la Universidad de Harvard y la Universidad de Stanford, han demostrado que los niños que entienden la responsabilidad de los quehaceres del hogar, tienen más probabilidades de convertirse en adultos felices, saludables e independientes.
Esto es lo que deben aprender en cada etapa
A los niños en edad preescolar se les pueden dar tareas simples como recoger sus juguetes todos los días o cada vez que los saquen. También pueden comenzar a aprender cómo recoger su habitación y guardar sus platos después de una comida.
Los niños necesitan incentivos por lo que sería buena idea que después de que complete una tarea, coloques en una tabla que marque su logro.
Para los niños de edad escolar las tareas debe aumentar también. Debes seguir haciendo que recojan sus cosas ellos mismos pero ya no sólo juguetes sino sus zapatos y mochilas cuando lleguen a casa de la escuela. Elogia su esfuerzo y aliéntalo a seguir practicando sin esperar la perfección, claro.
Los niños más grandes o pre adolescentes pueden comenzar a aprender a asumir más responsabilidades como poner la mesa, lavar los platos, barrer los pisos y hacer las camas.
Los adolescentes pueden ser más tercos o más conscientes así que es momento de que asuman responsabilidades que los preparen para el mundo real como preparar la comida, lavar la ropa o incluso los baños.