El truco viral y fácil con el que el rubor líquido te quedará mejor que nunca

Un paso a paso sencillo para dominar una textura que todavía se le resiste a muchas

Que las redes han democratizado la belleza o, por lo menos, las técnicas a las que tan solo tenían acceso unos pocos es un hecho. Todo es posible gracias al alcance que consiguen vídeos como el truco de la cinta de pelo que crea unas ondas espectaculares sin secador o tenacillas, el de aplicar polvos matificantes sobre las pestañas antes de la máscara para multiplicar su grosor o el que diseña unas cejas perfectas a través de cinco puntos clave. La nueva tendencia viral de la que vamos a hablarte ahora tiene como protagonistas a las mejillas, o más bien al colorete líquido, que, a pesar de sus promesas de un rubor luminoso que parece natural, sigue siendo una textura a la que muchas temen. 

Cómo aplicar el rubor líquido según las redes

El paso a paso es tan sencillo como trazar una línea en la base de la palma de la mano y restregarla con cuidado contra la otra: esto no solo crea el trazo perfecto depositar el producto justo donde se necesita, también rebaja la cantidad de pigmento para que el resultado sea más sutil. A continuación se coloca una mano sobre cada mejilla en sentido ascendente, hacia las sienes. Cuando las retires, tan solo hay que dar suaves tapeteos con las yemas de los dedos en los contornos para difuminarlos y lo que tendrás al final es un rubor con "efecto lifting" que eleva los pómulos y aporta una vitalidad a la piel que parece natural.