Las legumbres son semillas comestibles que provienen de las plantas leguminosas, y se encuentran encerradas en su interior como una pieza o en una hilera. Regularmente se presentan secas, como los frijoles, las lentejas, los chícharos, los garbanzos o las habas, y para su consumo tienen que ser cocinadas en agua para reblandecerlas. Su importancia reside en sus nutrientes y otras ventajas generales.
En 2016 la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) designó el Año Internacional de las Legumbres para celebrarlas, hablar de sus beneficios y su potencial para contribuir al cumplimiento de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. A raíz del éxito de este festejo, la Asamblea General de la ONU proclamó 10 de febrero Día Mundial de las Legumbres.
De acuerdo con la FAO, honrar a las legumbres con un día es una oportunidad única para sensibilizar a la opinión pública acerca del papel fundamental que desempeñan "en la transformación hacia unos sistemas agroalimentarios más eficientes, inclusivos, resilientes y sostenibles con miras a una mejor producción, una mejor nutrición, un mejor medio ambiente y una vida mejor, sin dejar a nadie atrás", algo realmente prometedor.
¿Por qué se celebra el Día de las Legumbres?
Aunque adelantamos un poco la respuesta, las legumbres tienen varios beneficios a la salud:
* Son fuente de proteína vegetal y combinadas con cereales se consiguen proteínas de alto valor biológico.
* Aportan fibra que ayuda a mejorar el sistema digestivo y a proteger la salud del intestino.
* Casi no contienen grasas, ayudan a reducir los niveles de colesterol malo (LDL) y a prevenir enfermedades cardiovasculares.
* Son una excelente fuente de hierro, especialmente cuando se combinan con vitamina C, lo que contribuye a prevenir la anemia y la desnutrición.