Una de las preguntas más constantes, que hasta hace unos años quedaba sin respuesta, es sobre cuánto se le debe pagar a las trabajadoras del hogar por sus servicios, ya sea diarios o mensuales.
INFORMALIDAD
Por mucho tiempo se trató de una cifra libre al parecer de cada empleador, lo cual generaba que el pago por las labores del hogar fuera disparejo a lo largo del país y con la libertad de que no fuera justo.
Además, se trataba de un oficio en el que predominaba la informalidad, es decir, únicamente se percibía un salario sin prestaciones ni seguridad social.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el valor económico de las labores del hogar en el país equivale a 6.8 billones de pesos al año.
Desde 2022 las personas que contraten a una trabajadora del hogar tienen la obligación de inscribirla al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), por lo que los pagos quedan sujetos a los tabuladores de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami).
En el caso del trabajo del hogar, que pertenece a las profesiones, oficios y trabajos especiales en el número 56 quedó en:
- 374.89 pesos diarios en la zona libre del norte
- 270.60 en el resto del país
Es decir que, si se paga cada quince días, el pago bruto sería de 4 mil 59 pesos y mensual de 8 mil 118 pesos.
La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo Nueva Edición (ENOEN) define a las personas ocupadas en el trabajo doméstico remunerado como aquellas que prestan su servicio en labores de aseo, asistencia y los relacionados al hogar de una persona o de una familia, a cambio de una remuneración económica.
En México, de acuerdo con la ENOEN, al cuarto trimestre del 2022, las personas de 15 años y más ocupadas en el trabajo doméstico remunerado ascendían a 2.5 millones, cifra equivalente alrededor de 4.2 por ciento del total de la población ocupada.
El trabajo doméstico remunerado ha sido una ocupación primordialmente femenina. De las 2.5 millones de personas ocupadas en estas actividades, 90.2 por ciento, es decir 2.2 millones, correspondió a mujeres y 9.8 por ciento, a hombres.