La contaminación es un problema latente en el mundo actual, por ello existen algunas prácticas que se pueden llevar a cabo para disminuir este fenómeno.
A continuación te contamos 5 recomendaciones para evitar utilizar plásticos de un solo uso, según la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
¿CÓMO EVITAR CONTAMINAR CON PLÁSTICO?La Profeco publicó un artículo donde habla sobre los plásticos de un solo uso y cómo reducir su impacto en el medio ambiente se puede hacer cambiando tus hábitos.
A continuación te mostramos las recomendaciones que hace la procuraduría para evitar contaminar con plásticos de un solo uso, según la Profeco:
- Usar recipientes de vidrio: Este tipo de envases sirven para guardar tus bebidas y alimentos. Además tienen la facilidad de lavarse, reutilizarse y reciclarse.
- Disminuye el uso de bolsas desechables: Mejor usa bolsas de tela, biodegradables, bolsas de compras pasadas, canastas o tu carrito del mandado.
- Ordenar comida a domicilio con empaques de papel o cartón: Es importante que preguntes por otras opciones para empacar tus alimentos que sean de otro material que no sea plástico.
- Evita utilizar desechables: No usar popotes, cubiertos de plástico o contenedores de unicel, o dales un segundo uso. Emplea alternativas reutilizables de metal, vidrio, bambú o madera.
- Compra productos a granel: En caso de que esté dentro de tus posibilidades, lleva tus recipientes cuando realices tus compras y evita usar recipientes como bandejas de poliestireno, botellas de PET, tetrabricks, envases de plástico, entre otros.
La última previsión de la ONU, que eligió dedicar el pasado Día Mundial de los Océanos a este tipo de contaminación y definió que para el 2050 podría haber más plástico que peces en el agua.
Los últimos datos de la Organización de las Naciones Unidas son devastadores: cada año, alrededor de 100.000 animales mueren a causa de la interacción con el plástico.
Una bolsa de este material tiene un promedio de uso de 30 minutos, pero podría permanecer en la superficie del mar por 400 años y poner en riesgo la vida de tortugas, peces y aves.
La situación actual no es solo fruto de cómo interactuamos ahora con el plástico, sino de cómo hemos estado gestionando los residuos hasta ahora. Y todo ello indica que, si las prácticas no cambian, el plástico seguirá acumulándose en los océanos y comprometiendo la vida de miles de especies. Incluso la nuestra.