El problema de la salud mental ha sido uno de los de mayor aumento durante la crisis sanitaria por la Covid-19 que, aunado al encierro, provocó incertidumbre y cambios de rutina. De acuerdo con el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, 18% de la población mexicana padece o ha padecido alguna dificultad relacionada con la salud mental.
Por otra parte, a más de un año del inicio de este evento en marzo de 2020 la sociedad se ha adaptado mejor a las condiciones de la llamada "nueva normalidad". En esta, se ha encontrado un nuevo equilibrio y la búsqueda de ayuda profesional aumentó en un 30%, según el Instituto Nacional de Psiquiatría. No obstante las tasas de estrés en México continuan elevadas y, a continuación, NotiPress presenta cinco recomendaciones de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días para cuidar la salud mental.
Relacionado con lo anterior, la r ecomendación más importante para la salud mental es acudir con un profesional, quien ayudará a identificar los factores del malestar y mejorar la convivencia con el exterior. Al respecto, cabe recordar, los profesionales de la salud mental no pueden "resolver la tristeza", son expertos en la conducta humana que ayudarán a conocer los procesos personales de cada individuo.
De igual manera, realizar actividad física constante ayuda progresivamente a mejorar el estado de ánimo y bienestar personal de quien la práctica. Ello principalmente debido a que durante el ejercicio, el cerebro libera dopamina y serotonina, sustancias químicas encargadas de equilibrar nuestros niveles de felicidad y sentimiento de satisfacción. A su vez, el ejercicio ayuda a mejorar los patrones de sueño, el descanso y las habilidades psicomotrices.
Aprender técnicas de relajación, desde yoga hasta mindfulness, brindan un conjunto de herramientas sencillas para el control de las emociones, lo que ayuda a reducir el estrés. Además de permitir una mejor atención al entorno, las técnicas de relajación pueden ayudar a reducir la tensión muscular y la presión arterial por medio de la respiración.
También, dormir la cantidad de horas adecuadas es fundamental para tener una salud mental más equilibrada. Está comprobado que el sueño tiene relación directa con el estado de ánimo, por lo que sentirse deprimido, enojado o irritable puede ser la respuesta ante una falta de descanso apropiado. Si bien depende de la edad, intentar dormir un mínimo de 7 horas en los mismos horarios ayudará a mejorar progresivamente el bienestar mental.
Finalmente, Russell Nelson, líder de La Iglesia de Jesucristo, considera que practicar la gratitud es una herramienta fundamental hoy en día. Apreciar la salud, el amor o la estabilidad que se tienen puede ayudar a "conectar" con la realidad y evitar caer en desesperación y sentimientos de incertidumbre.
Actualmente, afirma el Centro de la Opinión Pública de la UVM, hasta el 58% de la población total ha admitido sufrir problemas de salud relacionados con la ansiedad, llamada la "enfermedad del siglo XXI". Por ello, cabe recalcar que el cuidado de la salud mental es una cuestión seria y el bienestar psicológico y emocional es un trabajo diario de importancia para mejorar la calidad de vida.