Durante la penúltima jornada de mayo 2022, el peso se ubicó en su mejor nivel frente al dólar estadounidense no registrado desde marzo de 2020. Este incremento se pudo observar por la combinación de varios factores económicos en el país. Entre estos se encuentran un mayor apetito de riesgo inversionista, un elevado flujo de dólares hacia México y expectativas de un mayor diferencial en tasas de interés. Esto último entre el Banco de México (Banxico) y la Reserva Federal (Fed).
Así, según información de Banco Base, la moneda mexicana tuvo una apreciación de 0.11%, llegando a los 19.56 pesos por dólar. Esto fue un efecto a la par del debilitamiento del dólar por 0.31%, según el índice ponderado y una disminución general de la aversión al riesgo en los mercados financieros mundiales.
Con estos datos, el peso acumula en 2022 una apreciación de 4.78%, convirtiéndose en la cuarta moneda con mayores ganancias por detrás del rublo ruso, el real brasileño y el sol peruano. Vale recalcar que la mayoría de estas monedas (como el rubro ruso), han logrado estos incrementos por fuertes aumentos en los precios de materias primas. No obstante, en el caso de México la acumulación de ganancias para el peso se debe a una combinación de factores.
Entre los de mayor peso se encuentran los elevados flujos de dólares hacia el territorio mexicano por conceptos de remesas y pago de exportaciones durante 2022. Además, existe una expectativa elevada de que Banxico incremente en 75 puntos base la tasa de interés en el siguiente anuncio de política monetaria. Con ello, se incrementaría el diferencial de tasas con Estados Unidos y por ende, incrementaría el atractivo de la moneda nacional.
Además, cabe destacar que el momento del peso mexicano se da después de que la economía estadounidense se habría debilitado. Ejemplo de esto habría sido el reporte de ingreso y consumo personal de abril publicado por el Departamento de Comercio.
Dentro de dicho documento, los ingresos personales tuvieron un crecimiento mensual de 0.4% por debajo de la expectativa del mercado (0.5%). Además, la tasa de ahorro en marzo se ubicó en su menor nivel desde septiembre de 2008 con 4.4%, acumulando tres meses consecutivos por debajo del 6% algo inédito desde 2013. De esta manera, el peso se ha visto beneficiado de un debilitamiento del dólar y algunas especulaciones sobre los diferenciales entre los bancos centrales.