Las restricciones son contra Huawei y fueron anunciadas el jueves por el ministro de Industria del país, François-Philippe Champagne, quien dijo que la decisión mejorará los servicios de internet móvil y " protegerá la seguridad de los canadienses".
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Wang Wenbin, dijo que evaluarán la situación y tomarán medidas para salvaguardar los intereses de las compañías chinas.
"Sin ninguna evidencia sólida, la parte canadiense citó riesgos de seguridad vagos como pretexto para excluir a las empresas chinas relevantes de su mercado. Este movimiento viola el principio de economía de mercado y las reglas de libre comercio y daña gravemente los derechos e intereses legítimos de las empresas chinas", dijo el funcionario.
Huawei Canadá respondió con un comunicado en el que dijo que está "decepcionada": "Esta es una decisión política desafortunada que no tiene nada que ver con la seguridad cibernética o cualquiera de las tecnologías en cuestión".
Varias naciones, incluidas Reino Unido, Estados Unidos, Australia y Nueva Zelanda, ya impusieron restricciones a estas empresas.
Mientras tanto, ZTE dijo que rechaza la "premisa" del anuncio del gobierno canadiense, diciendo que es "altamente especulativo".