En los últimos meses, el ayuno intermitente ha ganado una gran popularidad y cada vez son más las personas que se suman a esta pauta de alimentación. Lo practican todo tipo de individuos, desde aquellos que tiene el objetivo de adelgazar hasta deportistas de élite que quieren mejorar su rendimiento y su salud.
La práctica del ayuno intermitente ha demostrado ser segura y los científicos también han demostrado que ayuda a perder peso, siempre y cuando se siga una de las variantes que se consideran saludables, como las dietas 14/10, 16/8, 18/6 o 20/4. Hay otras opciones más restrictivas, como la dieta OMAD, que consiste en comer solo una vez al día, que no están recomendadas y pueden poner en peligro tu salud.
Pero, más allá de que puede ayudar a adelgazar, ¿cuáles son los beneficios para la salud del ayuno intermitente? De acuerdo con diversos estudios científicos, esta pauta de alimentación tiene estos efectos positivos en tu organismo:
Cambia la función de hormonas, células y genes. Cuando tu organismo no recibe comida durante un tiempo determinado, se producen una serie de cambios. Tu cuerpo cambia los niveles hormonales para que la grasa almacenada sea más accesible, por ejemplo disminuyendo los niveles de insulina en sangre o aumentando los niveles de hormona del crecimiento humano para que la grasa se queme con más facilidad. Además, también se inician importantes procesos de reparación celular y se producen cambios beneficiosos en varios genes y moléculas relacionados con la longevidad y la protección contra enfermedades.
Puede reducir la resistencia a la insulina, y por tanto a la diabetes tipo 2. El ayuno intermitente puede reducir la resistencia a la insulina y disminuir los niveles de azúcar en sangre, lo que a su vez puede reducir el riesgo de diabetes tipo 2. Estudios en humanos revelan que el azúcar en sangre se reduce entre un 3 y un 6% en personas con prediabetes en el transcurso de 8 a 12 semanas de ayuno. La insulina se reduce entre un 20 y un 31%.
Puede reducir la inflamación y el estrés oxidativo. Varios estudios sugieren que el ayuno intermitente puede mejorar la resistencia del cuerpo al estrés oxidativo y también a combatir la inflamación. Esto puede tener beneficios contra el envejecimiento y prevenir el desarrollo de numerosas enfermedades.
Puede favorecer la salud cardiovascular. La investigación sugiere que el ayuno intermitente puede mejorar diversos factores de riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, entre ellos la presión arterial alta, los niveles de colesterol y triglicéridos, así como los marcadores inflamatorios.
Induce varios procesos de reparación celular. Al ayunar, nuestras células inician un proceso llamado autofagia, mediante el que se descomponen y metabolizan proteínas rotas y disfuncionales. Esto puede proteger contra varias enfermedades, entre ellas el cáncer, el alzhéimer y otras enfermedades neurodegenerativas.
Puede ayudar a prevenir el cáncer. Los estudios en animales revelan que el ayuno intermitente puede ayudar a prevenir el cáncer. Las investigaciones en humanos han llegado a hallazgos similares, aunque es necesario continuar investigando para comprobar sus efectos beneficiosos.