¿Por qué los "ambivertidos" son mejores líderes?

Es como preguntar si te gustan los gatos o los perros, una de aquellas cuestiones simples: ¿eres una persona tímida o extrovertida?

Todas aquellas identidades tiene sus propias fortalezas y debilidades, pero parece que hay un constante debate alrededor de cuál podría ser mejor tener.

Ciertos comentan que internet está "enamorado" de los introvertidos, y que ser un tímido por fin se ha vuelto algo fantástico, especialmente a lo largo de la enfermedad pandémica.

Aquello posiblemente sea en actitud a la cultura que a lo largo de un largo tiempo pareció celebrar y recompensar a los extrovertidos, en especial en muchas naciones de Occidente y primordialmente en el ámbito gremial, donde dichos tienen la posibilidad de usar su don de gentes natural.

Para complicar las cosas, unos estudios han demostrado que los introvertidos tienen la posibilidad de opacar a los extrovertidos como dirigentes, pese a que la conducta resuelto de un extrovertido se acopla realmente bien con la imagen que varios poseen de un director ejecutivo típico.

Entonces, ¿cuál de ambos es mejor? ¿Quién tiene más ventajas y quién tiene más triunfo en el trabajo: los empleados confiados y llenos de vida o los reservados y contenidos? Resulta que la contestación es esos que tienen la posibilidad de ser los dos: el camaleón "ambivertido".

La mezcla de ambos tipos de personalidades te puede hacer imprescindible en la oficina, según profesionales. Y pese a que actuar tanto extrovertida como introvertidamente puede parecer difícil, es una capacidad que todos tenemos la posibilidad de dominar, con un poco de práctica.

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