Fatiga y emociones negativas, son síntomas de enfermedad pandémica

Los seres vivos son seres sociales que requieren el contacto físico para manifestar sus emociones, al abrazar, tocar o besar se liberan hormonas y neurotransmisores como la oxitocina y las endorfinas que generan confort y trabajan en el cerebro para atenuar el dolor, simultáneamente que reducen los niveles de cortisol, la hormona del estrés.

No obstante, el quedarse en el hogar y evadir el contacto físico como medida de prevención frente a el coronavirus, puede provocar emociones negativas, y mientras la enfermedad pandémica se alarga cuesta cada vez más conservar las medidas sanitarias.

La carencia de besos, caricias y abrazos puede debilitar las interacciones más cercanas, y producir en los individuos una sensación de tristeza, desamparo y ansiedad, dice la Universidad Nacional Autónoma de México.

Según con profesionales en psicología toda clase de cambios de comportamiento involucrados con la salud ocasionan una recaída en un plazo de 6 meses en al menos el 50% de los individuos.

Además, los cambios en el estilo de vida de la población derivados por la enfermedad pandémica tienen la posibilidad de ocasionar frustración, estrés, tristeza, desmotivación y agotamiento de la mente y emocional, fenómeno que fue designado como fatiga pandémica.

No obstante, la Universidad Nacional Autónoma de México previene que a medida que la mayor parte de los individuos no se encuentren vacunadas, el peligro de contagio y la posibilidad de nuevos rebrotes continúan y las secuelas tienen la posibilidad de ser fatales.

Cantar, bailar y ejecutar los pasatiempos preferidos, así como reír y hacer reír a los otros, inclusive hacer un acto de generosidad son ocupaciones que tienen la posibilidad de contribuir a contrarrestar los sentimientos negativas.

Aprovechar la tecnología para tener una buena plática, fortalecerá el parentesco con los seres queridos, generando una sensación de confort.

Conservar una vida sana, reconocer y admitir los sentimientos, generar novedosas rutinas y conectarse con los otros por medio de los diversos medios de comunicación son maneras que tienen la posibilidad de contribuir a contrarrestar los efectos emocionales de la enfermedad pandémica de coronavirus.

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